¿Te han puesto una o varias multas recientemente? ¿Quieres poder evitarla pero no sabes cómo? ¿Sabías que los tribunales anulan casi el 50% de las multas de la DGT?
En este artículo te vamos a contar todo acerca de las infracciones de tráfico, cómo anularlas y en qué casos prescriben.
Las prescripciones de las multas de tráfico
Lo primero que debes tener en cuenta es que, si el organismo que te denuncia por infracción no se encarga de notificar de forma adecuada la sanción, esta no tendrá validez legal.
Existen dos formas para notificar una multa de tráfico.
- la primera es que te la entregue el mismo agente en mano. En caso de no ser así, el aviso que nos podemos encontrar en el automóvil no se considera notificación como tal y por tanto,
- será la Administración quien deberá remitirnos dicha notificación. Esta dispondrá de un plazo de tres meses para infracciones leves o seis meses para las infracciones graves y muy graves, para hacernos llegar la notificación de la multa.
La prescripción se producirá cuando la Administración no efectúe la notificación durante estos plazos de tiempo.
Cuando una multa prescribe, significa que ya no deberemos hacer frente al pago de la misma, puesto que iría en contra de la ley. El momento en el que se aplica la sanción es el momento en el que empieza a contar el plazo de prescripción, es decir, el mismo día de los hechos.
Tipos de infracciones
Las infracciones de tráfico suelen clasificarse en tres niveles, que van de menor a mayor gravedad:
- Leves: las infracciones de carácter leve son sancionadas por importes de 100€ y no suponen pérdida de puntos del carné de conducir.
- Podemos considerar sanciones leves conducir sin camiseta o con chanclas o circular con una matrícula que no se pueda identificar, entre otras.
- Graves: las infracciones de carácter grave son todas aquellas que ponen el peligro la seguridad. Suponen una multa de 200€ y, además, una pérdida de entre 2 y 4 puntos del carné de conducir.
- Se pueden considerar infracciones graves adelantar de forma ilegal o usar el teléfono móvil mientras conducimos, por ejemplo.
- Muy graves: las sanciones muy graves son las que presentan un riesgo mayor y que ponen en peligro la seguridad del conductor y de los demás. Se trata de sanciones económicas de 500€ y retirada de 6 puntos del carné de conducir.
- Algunos ejemplos de sanciones muy graves pueden ser la conducción temeraria o consumir bajo los efectos del alcohol o sustancias estupefacientes. En algunos casos, las multas pueden ascender a más de 500€ y se puede llegar a retirar el carné.
Imponer un recurso a una multa
Otro aspecto que suele ocurrir bastante a menudo es que haya un error de algún tipo en la multa emitida o no hayas sido tú quien haya cometido la infracción. En estos casos, dispones de tres opciones:
- Pagar la multa en un plazo de 20 días naturales con un 50% de reducción del importe, renunciando así al recurso.
- Pagar la multa pasados los primeros 20 días naturales sin descuento alguno, renunciando así al recurso.
- Presentar un recurso en un plazo de 15 días laborales.
Si se da el caso en que la Administración deba buscarte y por tanto, deba invertir tiempo hasta que te localiza, se interrumpirá el plazo de prescripción hasta un máximo de un mes. En el caso de que no consiga localizarte, lo publicará en el Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico o en un boletín de carácter oficial. A partir de ese momento, se dará por notificado al autor.
Pasado un año desde la notificación y si no se ha dado una resolución sancionadora, el procedimiento se dará como caducado oficialmente. Si hay una sanción de carácter económico, la Administración tendrá un máximo de 4 años seguidos para cobrar la multa. Después, se dará la sanción por prescrita.
¿Cómo ganar un recurso de una multa?
Normalmente, la gran mayoría de la gente prefiere pagar una multa durante los primeros veinte días (pudiendo aplicar el descuento del 50%), antes que recurrirla y, quizás, tener que acabar pagándola. No obstante, existen algunos factores que nos pueden hacer ganar el recurso:
- Errores en la notificación: cualquier error que se produzca en la notificación es motivo suficiente para ganar un recurso. Nos referimos a escribir mal el nombre o la propia matrícula del vehículo.
- No existen formas para demostrar que realmente has hecho lo que se te imputa.
La recomendación que queremos darte es que las autoridades de la policía o de la Guardia Civil, cuentan con presunción de verdad, es decir, que su testimonio es más que suficiente como prueba de que la multa es válida, en caso de ser dichos agentes quienes te hayan multado.
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