Hace no mucho tiempo, desde crediting.es dedicamos un artículo al terrible escándalo que se desató en EEUU en relación al trucaje de los coches diésel de la marca Volkswagen. Una modificación en los vehículos diésel cuya finalidad era mostrar valores más reducidos de las emisiones contaminantes.
Muchos ya conocen esta situación como el diéselgate y, pesar de las creencias, la venta de estos vehículos no ha dejado de crecer a lo largo del año. De hecho, durante este año la marca alemana ha entregado más de 7.6 millones de vehículos a sus clientes. Una cifra más elevada que la que se registró durante el año pasado en el mismo periodo de tiempo. Volkswagen ha conseguido aumentar sus ventas en un 2.4 % durante estos nueve meses.
Los consumidores de esta conocida marca alemana no parecen haberse visto afectados por la mala reputación que golpeó a Volkswagen a causa del trucaje de sus coches. Los usuarios siguen comprando y lo hacen con más fuerza que el año pasado. Aunque el gran escándalo del diéselgate no parece afectar en Europa, donde se han adquirido durante estos nueve meses de año un 3.5 % más de vehículos que el mismo periodo en 2015, en Estados Unidos sí que ha descendido la venta. Allí, donde se destapó el escándalo de los trucajes, la venta de ha caído en un 6.1 %.
No obstante, la compañía no parece preocupada. Sobre todo porque ese descenso de ventas en Estados Unidos se ha visto compensado con un crecimiento de las ventas en Asia. Y dentro de Asia en China han logrado resultados verdaderamente espectaculares. Una venta que supera en un 10.7 % la cantidad de vehículos que vendió la marca en el mismo periodo durante 2015. En total, Volkswagen lleva vendidos tan solo en China 2.85 millones de unidades en lo que va de año.
España también ha sido otra de los países con un crecimiento atractivo. En lo que va de año se han vendido en nuestro país un total de 313.000 unidades, lo que supone un 1.5 % de incremento de las ventas respecto al mismo periodo en 2015.
El diéselgate y el impacto sobre la marca Volkswagen
A pesar de estas buenas cifras, la marca alemana no ha salido completamente indemne de este gran escándalo. A pesar de que las ventas no se han visto excesivamente afectadas por el diéselgate, sus cifras se han desplomado en lo que va de año.
Los que más afectados se han visto por esta trampa y trucaje, han sido los accionistas de la compañía que se han pegado un gran golpe. Las acciones de la compañía se mueven a día de hoy por debajo de los 140 euros. El año pasado y por estas mismas fechas, las cifras de las acciones de Volkswagen se situaban alrededor de los 240 euros. Las acciones han caído en un 46 % en lo que va de año por lo que el valor de la empresa se ha reducido a la mitad durante 2016.
Tampoco hay que olvidar a todos los ciudadanos que se han visto obligados a respirar un aire más contaminado a causa de este trucaje y que son los otros grandes afectados del diéselgate.
En cifras generales, podemos hablar de que Volkswagen ha perdido un 36.8 % de beneficios en lo que va de año, lo que se traduce en 3579 millones de euros menos para sus arcas. A pesar de todo, la lectura no es tan negativa como cabría esperar. Muchos pensaban que este año entraría en pérdidas y no ha sido así.
Está claro que la marca alemana es capaz de mostrarse muy fuerte y luchadora a pesar de las adversidades y, a pesar de la gran polémica desatada con el diéselgate, muy probablemente quedará en pocos años completamente olvidado ante unas ventas que no se ven en absoluto afectadas.
