Las bicicletas eléctricas están a la orden del día. Cada vez son más los particulares que se decantan por este medio de transporte para desplazarse por las zonas urbanas. Así lo demuestran las iniciativas de los ayuntamientos que cada vez disponen de más capital para hacer más ecológicos los centros de las grandes ciudades. Madrid hace tiempo que se unió a esta iniciativa y la Diputación de Barcelona ha entrado más de 200 bicis eléctricas durante este mes a distintos servicios técnicos de diferentes municipios catalanes.
La entrega oficial tuvo lugar en un acto ofrecido el pasado miércoles 2 de noviembre en el Recinto de la Escuela Industrial de Barcelona. En esta sesión, no solo se hizo acto de entrega de las nuevas 203 bicicletas, sino que además se ofreció una charla para explicar el funcionamiento y mantenimiento de estos nuevos vehículos urbanos.
En total, y junto a esta nueva remesa, la Diputación de Barcelona ha entregado ya 451 bicicletas eléctricas que han sido repartidas de la siguiente manera:
- 141 bicicletas han sido destinadas a la policía local.
- 302 han sido destinadas para servicios municipales en un total de 226 municipios catalanes de la demarcación de Barcelona.
El interés de Barcelona por crear unas ciudades más ecológicas no es nuevo. Esta iniciativa comenzó allá por el año 2008. En este año la iniciativa intentaba impulsar el uso de la bicicleta eléctrica entre los cuerpos de seguridad de Barcelona. A partir de 2009 la buena acogida de las bicicletas eléctricas en Barcelona hizo que esta iniciativa se extendiese por otros municipios catalanes. Desde entonces esta acción no solo se ofrece a la policía, sino que también se ha extendido a otros servicios técnicos municipales. Desde servicios sociales hasta entidades municipales. Desde el año 2012, todas las bicicletas que ha cedido la Diputación de Barcelona son completamente eléctricas.
El objetivo de estas acciones es sencillo: lograr una movilidad por las ciudades mucho más sostenible y ecológica. Además, con la implantación de estos sistemas se consigue luchar contra el cambio climático desarrollando una política de eficiencia energética mucho más sostenible.
A estas iniciativas hay que unirle también el servicio de bicicletas públicas con el que cuenta Barcelona desde hace 9 años y que se conoce como Bicing. En los últimos años Bicing ha registrado un total de 36.000 desplazamientos al día de media con este sistema. Además, la intención es instalar un sistema completamente eléctrico para facilitar los viajes de más larga distancia dentro de los municipios de Barcelona.
Cuáles son las ventajas del uso de las bicicletas eléctricas en Barcelona:
- Son perfectas para hacer frente a los recorridos interurbanos largos o de mucha pendiente
- Durante los periodos estivales este tipo de bicicletas suponen menos esfuerzo para el usuario. La ventaja de esto está directamente ligada con la movilidad laboral. Al sudar menos se convierte en un tipo de transporte aceptable para ir al trabajo.
- A nivel general presenta excelentes ventajas frente a otros vehículos motorizados. Por ejemplo, que no expulsa emisiones contaminantes, que resultan seguras al estar controlada su velocidad (se puede circular a un máximo de 25 km / hora) y que su nivel de ruido es mucho menor que el de otros vehículos motorizados.
Está claro que el uso de bicicletas eléctricas en las zonas urbanas es un método de desplazamiento alternativo mucho más ecológico y sostenible. Y Barcelona lo demuestra apostando por ellas. Se prevé que para 2018 el número de bicicletas eléctricas para uso personal a través del renting se habrá triplicado.