2015 y 2016 han sido buenos años para el sector del motor ya que han aumentado las ventas de coches y con ellas los seguros a todo riesgo. La ligera recuperación económica que hemos vivido junto a las medidas ofrecidas por el Banco Central Europeo, y que han obligado a los bancos a mover el dinero, han dado pie a la concesión de créditos con los que ha sido posible la compra de nuevos vehículos.
Tras una racha de seis años muy malos para el sector del motor, por fin, en el año 2015, se logró superar la barrera del millón de unidades. En 2016 las buenas noticias siguieron en aumento y el sector del motor obtuvo un crecimiento del 10.8 % en comparación a 2015. En cifras hablamos de 1.153.645 nuevos coches matriculados. Esta nueva tendencia de compra ha supuesto también un cambio en la contratación de seguros.
Según los datos ofrecidos por el Observatorio del Vehículo de Empresa (CVO), promovido por Arval, uno de los mayores especialistas en renting de vehículos, el número de seguros a todo riesgo ha crecido durante 2016 a causa de las nuevas matriculaciones. A mayores ventas de coches, mayor preocupación por parte de sus propietarios. En general, la contratación de seguros a todo riesgo por particulares ha crecido en un 29 %. Por su parte los seguros a terceros se han visto reducidos en un 3 % en comparación a 2015. Y lo mismo ha sucedido con los seguros con franquicias, cuya contratación bajó a un 11.5 % en 2016 frente al 13.3 % de particulares que los eligieron en 2015.
Y, a pesar de que aumentan las ventas de coches considerablemente durante estos dos años, también lo han hecho el número de reparaciones. Algo curioso si pensamos que se trata de vehículos recién estrenados. En general los coches nuevos se han llevado el 38 % de las reparaciones durante el año pasado, lo que supone nueve puntos porcentuales más de las reparaciones que se ejecutaron sobre este tipo de vehículos en 2015. Sin embargo, el número de coches de entre cinco y diez años que pasaron por el taller durante 2016 se ha visto reducido considerablemente. Esto ha puesto en sobre aviso a los talleres y los concesionarios pues pronto notarán la ausencia de estas reparaciones en coches de cinco a diez años. Justo los años que coinciden con el periodo más duro de la crisis económica en España.
¿Por hay más coches nuevos que viejos que acuden al taller?
Por norma general los coches nuevos acuden con más regularidad al taller o al concesionario durante los dos primeros años desde su compra para realizar las revisiones periódicas. Unas revisiones que se hacen con más holgura cuando el coche se encuentra dentro de los dos años de garantía por Ley, o de los cuatro o cinco que ofrecen algunas marcas.
Aunque el número de coches nuevos haya crecido durante 2015 y 2016, tanto los talleres como los concesionarios se enfrentan a la escasez de vehículos de entre cinco y diez años. Algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta que entre 2009 y 2013 la venta de vehículos nuevos se redujo a unos 700.000 turismos. Para que los talleres mantengan un buen nivel de negocio sería necesario importar coches de entre seis y diez años. Por este motivo, aunque la venta ha vuelto a superar el millón de unidades, se espera que el negocio de los talleres permanezca estancado durante al menos un par de años por la falta de coches de cierta antigüedad.